domingo, 22 de diciembre de 2013

Divina Commedia. Recopilación pictórica.

Ecce una bonita recopilación de imágenes de la Divina Comedia.
 No son todas del mismo artista, pero tienen en común que son muy tétricas, así en blanco y negro y con expresiones faciales de horror.
Representan la mayoría de ellas los diferentes castigos de las almas en el infierno, aunque también hay otras que presentan el purgatorio y el paraíso.
Muy emotivas.



























Canto V Divina Commedia

Dejo en este post el vídeo en el que Roberto Benigni recita el canto V de La Divina Commedia junto a los versos del mismo en la lengua original (para los más atrevidos).
CANTO V
Cosi` discesi del cerchio primaio
giu` nel secondo, che men loco cinghia,
e tanto piu` dolor, che punge a guaio.
Stavvi Minos orribilmente, e ringhia:
essamina le colpe ne l'intrata;
giudica e manda secondo ch'avvinghia.
Dico che quando l'anima mal nata
li vien dinanzi, tutta si confessa;
e quel conoscitor de le peccata
vede qual loco d'inferno e` da essa;
cignesi con la coda tante volte
quantunque gradi vuol che giu` sia messa.
Sempre dinanzi a lui ne stanno molte;
vanno a vicenda ciascuna al giudizio;
dicono e odono, e poi son giu` volte.
<<O tu che vieni al doloroso ospizio>>,
disse Minos a me quando mi vide,
lasciando l'atto di cotanto offizio,
<<guarda com'entri e di cui tu ti fide;
non t'inganni l'ampiezza de l'intrare!>>.
E 'l duca mio a lui: <<Perche' pur gride?
Non impedir lo suo fatale andare:
vuolsi cosi` cola` dove si puote
cio` che si vuole, e piu` non dimandare>>.
Or incomincian le dolenti note
a farmisi sentire; or son venuto
la` dove molto pianto mi percuote.
Io venni in loco d'ogne luce muto,
che mugghia come fa mar per tempesta,
se da contrari venti e` combattuto.
La bufera infernal, che mai non resta,
mena li spirti con la sua rapina;
voltando e percotendo li molesta.
Quando giungon davanti a la ruina,
quivi le strida, il compianto, il lamento;
bestemmian quivi la virtu` divina.
Intesi ch'a cosi` fatto tormento
enno dannati i peccator carnali,
che la ragion sommettono al talento.
E come li stornei ne portan l'ali
nel freddo tempo, a schiera larga e piena,
cosi` quel fiato li spiriti mali
di qua, di la`, di giu`, di su` li mena;
nulla speranza li conforta mai,
non che di posa, ma di minor pena.
E come i gru van cantando lor lai,
faccendo in aere di se' lunga riga,
cosi` vid'io venir, traendo guai,
ombre portate da la detta briga;
per ch'i' dissi: <<Maestro, chi son quelle
genti che l'aura nera si` gastiga?>>.
<<La prima di color di cui novelle
tu vuo' saper>>, mi disse quelli allotta,
<<fu imperadrice di molte favelle.
A vizio di lussuria fu si` rotta,
che libito fe' licito in sua legge,
per torre il biasmo in che era condotta.
Ell'e` Semiramis, di cui si legge
che succedette a Nino e fu sua sposa:
tenne la terra che 'l Soldan corregge.
L'altra e` colei che s'ancise amorosa,
e ruppe fede al cener di Sicheo;
poi e` Cleopatras lussuriosa.
Elena vedi, per cui tanto reo
tempo si volse, e vedi 'l grande Achille,
che con amore al fine combatteo.
Vedi Paris, Tristano>>; e piu` di mille
ombre mostrommi e nominommi a dito,
ch'amor di nostra vita dipartille.
Poscia ch'io ebbi il mio dottore udito
nomar le donne antiche e ' cavalieri,
pieta` mi giunse, e fui quasi smarrito.
I' cominciai: <<Poeta, volontieri
parlerei a quei due che 'nsieme vanno,
e paion si` al vento esser leggeri>>.
Ed elli a me: <<Vedrai quando saranno
piu` presso a noi; e tu allor li priega
per quello amor che i mena, ed ei verranno>>.
Si` tosto come il vento a noi li piega,
mossi la voce: <<O anime affannate,
venite a noi parlar, s'altri nol niega!>>.
Quali colombe dal disio chiamate
con l'ali alzate e ferme al dolce nido
vegnon per l'aere dal voler portate;
cotali uscir de la schiera ov'e` Dido,
a noi venendo per l'aere maligno,
si` forte fu l'affettuoso grido.
<<O animal grazioso e benigno
che visitando vai per l'aere perso
noi che tignemmo il mondo di sanguigno,
se fosse amico il re de l'universo,
noi pregheremmo lui de la tua pace,
poi c'hai pieta` del nostro mal perverso.
Di quel che udire e che parlar vi piace,
noi udiremo e parleremo a voi,
mentre che 'l vento, come fa, ci tace.
Siede la terra dove nata fui
su la marina dove 'l Po discende
per aver pace co' seguaci sui.
Amor, ch'al cor gentil ratto s'apprende
prese costui de la bella persona
che mi fu tolta; e 'l modo ancor m'offende.
Amor, ch'a nullo amato amar perdona,
mi prese del costui piacer si` forte,
che, come vedi, ancor non m'abbandona.
Amor condusse noi ad una morte:
Caina attende chi a vita ci spense>>.
Queste parole da lor ci fuor porte.
Quand'io intesi quell'anime offense,
china' il viso e tanto il tenni basso,
fin che 'l poeta mi disse: <<Che pense?>>.
Quando rispuosi, cominciai: <<Oh lasso,
quanti dolci pensier, quanto disio
meno` costoro al doloroso passo!>>.
Poi mi rivolsi a loro e parla' io,
e cominciai: <<Francesca, i tuoi martiri
a lagrimar mi fanno tristo e pio.
Ma dimmi: al tempo d'i dolci sospiri,
a che e come concedette Amore
che conosceste i dubbiosi disiri?>>.
E quella a me: <<Nessun maggior dolore
che ricordarsi del tempo felice
ne la miseria; e cio` sa 'l tuo dottore.
Ma s'a conoscer la prima radice
del nostro amor tu hai cotanto affetto,
diro` come colui che piange e dice.
Noi leggiavamo un giorno per diletto
di Lancialotto come amor lo strinse;
soli eravamo e sanza alcun sospetto.
Per piu` fiate li occhi ci sospinse
quella lettura, e scolorocci il viso;
ma solo un punto fu quel che ci vinse.
Quando leggemmo il disiato riso
esser basciato da cotanto amante,
questi, che mai da me non fia diviso,
la bocca mi bascio` tutto tremante.
Galeotto fu 'l libro e chi lo scrisse:
quel giorno piu` non vi leggemmo avante>>.
Mentre che l'uno spirto questo disse,
l'altro piangea; si` che di pietade
io venni men cosi` com'io morisse.

E caddi come corpo morto cade.




http://www.youtube.com/watch?v=FfvQS0B5lYo


lunes, 16 de diciembre de 2013

MI DIVINA COMEDIA

MI DIVINA COMEDIA


Cogiendo como referencia la obra de Dante “La Divina Comedia”, voy a hacer mi adaptación a  la entrada del Infierno.
Yo, en lugar de bajar al Infierno con el autor latino Virgilio como hizo Dante, bajo con el autor español y prestigiado Cervantes.

Adentrada en el pecado de derrochar, Cervantes quiso hacerme entender que no estaba yendo por el camino adecuado. Me ayudó a entrar en razón para seguir el camino recto. Para esto no había mejor forma que ver el castigo que sufren los demás por el mismo pecado cometido y otros mucho más graves.
Asustada como jamás lo había estado, entré en el lugar donde todo es oscuro y temible.
Quería prestar atención a cualquier detalle que se pasase por delante. Lo primero que me llamó la atención fue la puerta. Era de color marrón oscuro, con grietas, señales de uñas arrastradas de arriba hasta el final de esta, con el pomo morado oscuro y oxidado. Lo que más destacaba era la inscripción en medio de la puerta: “Por pecar en vida, no queda más esperanza que la dura eternidad”. Una oración que no me dejó otra expresión más que la cara paralizada como si hubiese visto un conjunto de quinientos fantasmas. Ingenua de mí. Lo que había ahí dentro era mucho peor que esa barbaridad de fantasmas.
En la puerta de este terrorífico lugar se encontraba Fluffy, un hombre demacrado, de pelo rojizo y ondulado, con barba tan larga como es el invierno y lo más espeluznante, con lágrimas negras cayendo sin cesar de sus ojos violeta.  Parecía mentira, pero no era lo más terrorífico que iba a presenciar en aquel lugar. Se puso furioso al ver que era un alma viva y me enseñó sus colmillos vampíricos. Cervantes, con su ingenio de la palabra, consiguió calmarlo y dejarme pasar.
Pensaba que el río que había en esta parte, de color negro y peces plateados con ojos granates, era inofensivo, pero estaba equivocada. Los peces parecían pirañas. Para poder cruzar al otro extremo, mi guía me ofreció una especie de zapatos de acero con motor y con ellos podría llegar a mi destino sin ser atacada por los peces. Él y yo, cogidos de la mano, conseguimos atravesarlo sin ninguna especie de problemas sobrenaturales.
 Entonces, habíamos llegado al primer círculo. El círculo de los malos consejeros. Yo pensaba que esas personas no merecían aquel castigo que les había tocado sufrir, pero así era según el señor todo poderoso.
Eran arrastrados y ahogados sin cesar en el lago Nimbus. Era un lago repugnante, lleno de barro. Gusanos y cucarachas que recorrían sin pausa el cuerpo de estos pobres pecadores. Se veían caras de horror y sufrimiento, también de arrepentimiento. Se notaba el dolor en el ambiente. Pero ya nada podía cambiar, habían pecado y ese era su sitio en el viaje eterno.
Conseguí poder mirar toda aquella escena, pero en círculos más hondos tuve que esconderme detrás del espíritu del poeta español que me acompañaba en este viaje y cerrar los ojos. También tengo que decir que yo no me desmayaba, yo devolvía todo lo que en mi estómago se hallaba.
Sin poder pararnos a observar con detención, tuvimos que seguir caminando. Para descender al próximo círculo, el de los adivinos, había una especie de tobogán por el que teníamos que pasar. Este daba muchas vueltas, tantas que acabé mareada. Poco antes de llegar ya se podían oír los llantos, gritos y el dolor de aquellos espíritus castigados con falsas esperanzas de acabar con ese infierno. Su castigo eran voces continuas que animaban a salir de ahí, cosa que resultaba completamente imposible porque estaban ahí de forma perpetua.
Conforme bajábamos y cambiábamos de círculo, los espíritus encerrados habían cometido pecados más fuertes. Por lo tanto, sus castigos eran cada vez peores.

Hasta tal punto de daño psicológico, que es tanto más fuerte como el físico. Reconocí a mucha gente que estaba por aquel mundo de dolor sufriendo algunos de los dieciséis castigos diferentes que sufrían en los dieciséis círculos del Infierno.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

El Decamerón. Sexta jornada. Giotto.



¿Veis que ilustraciones tan bonitas? ¿No os ayudan a imaginar la época?´
Os propongo la lectura de otro cuento del Decamerón. En él aparece como personaje el pintor Giotto, por el que Boccaccio sentía gran admiración.


SEXTA JORNADA
COMIENZA LA SEXTA JORNADA DEL DECAMERÓN, EN LA CUAL, BAJO EL GOBIERNO DE ELISA, SE DISCURRE SOBRE QUIEN CON ALGUNAS PALABRAS INGENIOSAS SE RESARCE DE ALGÚN ATAQUE, O CON UNA RÁPIDA RESPUESTA U OCURRENCIA ESCAPA A LA PERDICIÓN O AL PELIGRO O AL DESHONOR


NOVELA QUINTA

Micer Forese de Rábatta y el maestro Giotto, pintor, viniendo de Mugello, mutuamente se burlan de su mezquina apariencia .

Al callarse Neifile, habiendo gustado mucho a las señoras la respuesta de Ghichibio, así habló Pánfilo por voluntad de la reina:

Carísimas señoras, sucede con frecuencia que, así como la fortuna bajo viles oficios algunas veces oculta grandes tesoros de virtud, como hace poco fue mostrado por Pampínea, también bajo feísimas formas humanas se encuentran maravillosos talentos escondidos por la naturaleza. La cual cosa muy aparente fue en dos de nuestros conciudadanos sobre los que entiendo hablar brevemente: porque el uno, que micer Forese de Rábatta se llamaba, siendo bajo de estatura y deforme, con una cara tan aplastada y retorcida que hubiera parecido deforme a cualquiera de los Baronci que más deformada la tuvo , tuvo tanto talento para las leyes que por muchos hombres de valor fue reputado almacén de conocimientos civiles; y el otro, cuyo nombre fue Giotto, fue de ingenio tan excelente que ninguna cosa de la naturaleza (madre de todas las cosas y alimentadora de ellas con el continuo girar de los cielos) con el estilo, la pluma o el pincel había que no pintase tan semejante a ella que no ya semejante sino más bien ella misma pareciese, en cuanto muchas veces en las cosas hechas por él se encuentra que el vivísimo juicio de los hombres se equivoca creyendo ser verdadero lo que es pintado . Y por ello, habiendo él hecho tornar a la luz aquel arte que muchos siglos bajo los errores ajenos (que más para deleitar los ojos de los ignorantes que para complacer al intelecto de los sabios pintan) había estado sepultada, merecidamente puede decirse que es una de las luces de la florentina gloria; y tanto más cuanto que, con la mayor humildad, viviendo siempre en ella como maestro de las artes, la conquistó rehusando siempre ser llamado maestro; el cual título, por él rechazado, tanto más resplandecía en él cuanto más era usurpado con avidez mayor por quienes menos sabían que él o por sus discípulos. Pero por muy grande que fuese su arte, no era él en la persona y el aspecto en nada más hermoso de lo que era micer Forese. Pero volviendo a la historia digo que:

Tenían en Mugello micer Forese y Giotto sus posesiones; y habiendo ido micer Forese a ver las suyas en este tiempo del verano en que los tribunales tienen vacaciones, y volviendo por acaso sobre un mal rocín de alquiler, encontró al ya dicho Giotto, el cual semejantemente, habiendo visto las suyas, se volvía a Florencia; el cual ni en el caballo ni en los arreos estando en nada mejor que él, como viejos que eran, avanzando poco a poco, se juntaron. Sucedió, como muchas veces en el verano vemos suceder, que les alcanzó una súbita lluvia, de la que lo más pronto que pudieron se refugiaron en casa de un labrador amigo y conocido de los dos. Pero luego de un rato, no llevando el agua aspecto de parar y queriendo ellos llegar en el día a Florencia, pidiendo prestadas al labrador dos viejas capas de paño romañés y dos sombreros todos roídos por el tiempo, porque mejores no había, comenzaron a caminar. Ahora, habiendo andado algo, y viéndose todos mojados y, por las salpicaduras que los rocines hacen en gran cantidad con las patas, llenos de barro, cosas que no suelen añadir ningún honor, aclarando un tanto el tiempo, ellos, que largamente habían venido callados, empezaron a conversar. Y micer Forese, cabalgando y escuchando a Giotto, que era excelentísimo conversador, comenzó a considerarlo de lado y de frente y por todas partes; y viéndolo todo tan deslustrado y tan mezquino, sin considerarse a sí mismo, comenzó a reírse y dijo:

-Giotto, ¿cuándo, si viniese a nuestro encuentro algún forastero que nunca te hubiera visto, crees tú que pensaría que eras el mejor pintor del mundo, como eres?

Giotto le respondió prestamente:


-Señor, creo que lo creería cuando mirándoos a vos creyese que sabíais el abecé. Lo que, oyendo micer Forese, su error reconoció y se vio pagado en la misma moneda con que había vendido las mercancías.

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Y para completar: "Media dosis de cultura" y algunos de sus cuadros:

 Giotto di Bondone, mejor conocido solo por su nombre de pila fue un notable pintorescultor y arquitecto italiano del Trecento
Se lo considera el primer artista de los muchos que contribuyeron a la creación del Renacimiento italiano y uno de los primeros en romper las limitaciones del arte y los conceptos medievales. Se dedicó fundamentalmente a pintar temas religiosos, siendo capaz de dotarlos de una apariencia terrenal, llena de sangre y fuerza vital. 
Su importancia en la historia del arte es tremenda. No solo por sus innovaciones en el ámbito de la pintura, sino porque consiguió alcanzar un estatus de reconocimiento social excepcional para un artesano.







martes, 19 de noviembre de 2013

ULISES, un relato breve de Ángel Olgoso



Yo, el paciente y sagaz Ulises, famoso por su lanza, urdidor de engaños, nunca abandoné Troya. Por nada del mundo hubiese regresado a Ítaca. Mis hombres hicieron causa común y ayudamos a reconstruir las anchas calles y las dobles murallas hasta que aquella ciudad arrasada, nuevamente populosa y próspera, volvió a dominar la entrada del Helesponto. Y en las largas noches imaginábamos viajes en una cóncava nave, hazañas, peligros, naufragios, seres fabulosos, pruebas de lealtad, sangrientas venganzas que la Aurora de rosáceos dedos dispersaba después. Cuando el bardo ciego de Quíos, un tal Hornero, cantó aquellas aventuras con el énfasis adecuado, en hexámetros dáctilos, persuadió al mundo de la supuesta veracidad de nuestros cuentos. Su versión, por así decirlo, es hoy sobradamente conocida. Pero las cosas no sucedieron de tal modo. Remiso a volver junto a mi familia, sin nostalgia alguna tras tantos años de asedio, me entregué a las dulzuras de las troyanas de níveos brazos, ustedes entienden, y mi descendencia actual supera a la del rey Príamo. Con seguridad tildarán mi proceder de cobarde, deshonesto e inhumano: no conocen a Penélope. 

miércoles, 30 de octubre de 2013

Un poema de Borges sobre La Odisea

Borges:  ODISEA, LIBRO VIGÉSIMO TERCERO

Ya la espada de hierro ha ejecutado
la debida labor de la venganza;
ya los ásperos dardos y la lanza
la sangre del perverso han prodigado.

A despecho de un dios y de sus mares
a su reino y su reina ha vuelto Ulises,
a despecho de un dios y de los grises
vientos y del estrépito de Ares.

Ya en el amor del compartido lecho
duerme la clara reina sobre el pecho
de su rey pero ¿dónde está aquel hombre

que en los días y noches del destierro
erraba por el mundo como un perro
y decía que Nadie era su nombre?

Monsiau, "Return of Odysseus"

Los poetas latinos

TEMA 1.3.    LOS POETAS LATINOS: VIRGILIO, HORACIO, OVIDIO

INTRODUCCIÓN: LA LITERATURA LATINA
La literatura latina imita a la griega tanto en sus formas como en sus contenidos y, a su vez, se convierte en modelo para las literaturas occidentales posteriores. La dependencia griega se muestra sobre todo en el desarrollo de los géneros literarios y en la mitología (pero no significa que los autores latinos se comporten como meros imitadores de lo helénico); por otra parte, el carácter más pragmático de los romanos les lleva a cultivar especialmente  los géneros relacionados con la historia, la sátira y la didáctica. Aportación específicamente romana es la profundización en la lírica del yo poético y el cambio de rumbo que se opera en la epopeya (convertida por Virgilio en un poderoso instrumento ideológico mediante el que defender la concepción romana del mundo)
Esta  literatura surge paralela al desarrollo político del pueblo romano, por lo que se extiende por espacio de ocho siglos y abarca los siguientes periodos:

          HISTORIA
LITERATURA
Monarquía
753-IV a.C.
-Fundación Roma
-Siete reyes
- Expulsión Tarquino el soberbio
Literatura oral: carmina
República
IV-I a.C.
-Magistraturas políticas.
-Romanización
-  Conquista de Italia
-Guerras púnicas y civiles
Comedia: Plauto y Terencio
Lírica: Catulo
 Oratoria: Cicerón
Historia: Julio César y Salustio
Imperio
I a.C. – V d.C.


-Dinastía Julio-Claudia (luego, otras: Flavia…)
 -Incendio de Roma, Erupción del Vesubio
-Edicto de Milán;  la capital : Constantinopla.
-Religión oficial: cristianismo
 División y caída del imperio
Épica: Virgilio y Ovidio
Lírica: Horacio.
Tragedia: Séneca
Historia: Tito Livio y Tácito

Sirva el cuadro anterior para citar, al menos,  a sus autores más representativos ya que nosotros nos vamos a centrar en el estudio de los tres grandes poetas de la época imperial: Virgilio, Horacio y Ovidio.

VIRGILIO
Publio Virgilio Marón (71-19 a.C.) nació cerca de Mantua; estudió en Cremona y Milán, y posteriormente en Roma. Fue un personaje distinguido en la corte del emperador Octavio Augusto, quien le apoyó y admiró en todo momento, al igual que su buen amigo Mecenas. La muerte le sorprendió al regreso de un viaje a Grecia, en Brindis, ya en tierras italianas.
Su producción es poco numerosa, pero muy variada:
Las Bucólicas son diez églogas que cantan la vida sencilla del campo en un ambiente idílico, pastoril.
Las Geórgicas, poema sobre agricultura y ganadería, en cuatro cantos. Pertenecen a la poesía didáctica.
La Eneida,  obra cumbre de la poesía épica latina, está considerada como la epopeya del pueblo romano . Virgilio se propuso componer una epopeya nacional en la que se glorificase el destino de Roma  ; con ella satisface plenamente a Augusto, quien añoraba la creación de una nueva poesía que expresara el significado y los valores de la romanidad  y en la que se ensalzase a la gens Iulia, a la que pertenecía el emperador. Consigue ambos propósitos mediante Eneas, el héroe del poema, hijo de la diosa Venus, de la que la familia Julia se decía descendiente (Julia deriva de Iulo, el hijo de Eneas)
            El tema de la Eneida es la huida de Troya y las aventuras de Eneas hasta llegar al Lacio, donde tiene que luchar con distintos enemigos para lograr establecer la nueva Troya, según el mandato de los dioses. Los doce cantos que componen la Eneida pueden estructurarse en dos partes: los seis primeros, hechos a imagen de la Odisea, narran los viajes y peripecias de Eneas desde su salida de Troya, destruida por los griegos, hasta su llegada a Italia; los seis últimos cuentan las luchas que el protagonista sostiene con los pueblos que habitan el Lacio, a semejanza de la Ilíada.
En cuanto a los valores literarios sobresalen de manera especial los recursos narrativos que el autor utiliza. Virgilio no narra los acontecimientos de forma cronológica; así el canto I comienza con la llegada de Eneas y sus compañeros a las costas de Cartago, donde son acogidos por Dido, y a través del relato que el protagonista le hace a la reina nos enteramos de la destrucción de Troya. Para narrar algunos sucesos protagonizados por el propio Augusto, posteriores a Eneas, el autor hace bajar al héroe al Hades, donde Anquises, su padre, le muestra el futuro de Roma y los grandes personajes que nacerán, entre los que figuran Augusto y otros componentes de la familia Julia.
Considerada una de las obras maestras de la literatura universal,  de una extraordinaria perfección estilística,  Virgilio lleva con ella al hexámetro a su máxima perfección .

HORACIO (65-8 a.C.)
Educado en Roma y en Atenas, Quinto Horacio Flaco tuvo una discreta participación en los asuntos públicos de Roma, prefiriendo la vida retirada en su finca en tierras de los sabinos. Allí, bajo el patronazgo de Mecenas y con el visto bueno de Augusto, se dedicó -nunca mejor dicho- al "ocio creador".
Obra: Su producción  es muy abundante. Nos centraremos en sus dos grandes monumentos líricos; las Odas (Carmina) y los Epodos (Epodi).
Las Odas :  103 composiciones de tema variado (reflexiones filosóficas, episodios mitológicos, dedicatorias a amigos, motivos patrióticos, episodios autobiográficos etc.); la muerte es el hilo conductor de buena parte de sus poesías, incluso el momento alegre del carpe diem tiene su raíz en la estremecedora afirmación de que la muerte es la última línea de las cosas, por lo que se debe vivir al máximo el momento. Utiliza gran variedad de versos y estrofas, y la perfección estilística es notable.
Los Epodos: composiciones realistas en las que el autor denuncia los vicios de la sociedad contemporánea (sus ataques  van dirigidos no contra personas individuales, sino contra tipos como el mal poeta, la hechicera, el usurero... Están a medio camino entre la poesía satírica y la lírica. Sorprende un tanto encontrar en esta colección  el famoso Beatus ille..." , que se ajusta más al espíritu de las Odas.
Su poesía está plagada de tópicos, entre los que podemos destacar los siguientes:
            - Aurea mediocritas: el dorado término medio, el justo medio, precisamente ese en el que se encuentra la virtud; el vivir alejado de los excesos y las ambiciones.
- Beatus ille: elogio de la vida sencilla y retirada en el campo. El ideal de felicidad está basado en la ausencia de pasiones -vanidad, avaricia, cargos...- y en vivir de acuerdo con la propia conciencia, retirado.
- Carpe diem: aprovecha el momento, vive el día de hoy, porque no sabemos lo que vamos a vivir y si podremos disfrutar del día de mañana. Invita a vivir el presente.
- Dulce et decorum est pro patria mori: es dulce y decoroso morir por la patria; habla del patriotismo y de la necesidad de servir a la patria y de morir por ella.
Horacio tuvo mucha influencia en Garcilaso de la Vega y en Fray Luis de León.

OVIDIO (43 a.C.-18 d.C.)
Publio Ovidio Nasón , natural de Sulmona, se trasladó pronto a Roma, donde se formó cerca de los círculos aristocráticos de la época. Viajó a Atenas y al Asia Menor. Por causas poco claras, tuvo que salir al exilio a Tomis, en el Mar Negro. Hay quienes dicen que fue el tono atrevido de alguna de sus obras la causa de ese destierro; otros creen que se trató de un montaje del propio Ovidio, y que el destierro como tal debe ponerse en duda.
Ovidio tuvo que salir de Roma porque sus obras amorosas no fueron bien acogidas por el emperador. Al parecer, el poeta se había visto envuelto en un episodio un tanto escabroso en relación con los adulterios de Julia, la nieta de Augusto, que fue desterrada también el año 8 d.C., casi al tiempo que el poeta.
Obra: Aparte de Las Metamorfosis, su gran aportación a la literatura universal , destacaremos las siguientes  obras ( dentro de una producción  abundante, densa y no siempre fácil de clasificar):
Las Heroidas : cartas literarias escritas en verso; cartas de mujeres enamoradas a hombres que no siempre las correspondieron.
Amores:  la primera obra del poeta, es un conjunto de poemas que exponen todos los lances de una pareja de amantes; la espera, los celos el rechazo, la aceptación y el goce efímero.
 Ars amandi o Arte de amar: todo un tratado para seducir. Responde básicamente a un esquema tripartito: búsqueda del amor, conquista y conservación de éste.
Tristia : cinco libros de elegías escritas en el destierro; la tristeza, melancolía, soledad desesperación se perciben en cada página.
Las Metamorfosis : extenso poema mitológico en el que se narra un total de 250 mitos y leyendas sobre las transformaciones de héroes, dioses y personajes mitológicos en seres vegetales, animales o constelaciones. Los 15 libros que integran el poema se dividen en cuatro grandes secciones: los dos primeros abarcan desde los orígenes remotos de la humanidad (mitos de Faetón, Apolo y Dafne, Narciso, etc.) hasta el rapto de Europa; los libros 3-6 relatan los mitos tebanos (Acteón, Perseo, Filomena, etc.) hasta el inicio del viaje de los argonautas; los libros 7-11 contienen la narración de este viaje y de los infortunados amores de Jasón y Medea, así como las historias de Teseo y el Minotauro, Hércules y Deyanira, Orfeo, Ganímedes, Ícaro y Dédalo, etc.; los libros 12-15, por último, se centran en los mitos de la guerra de Troya y otros sucesos posteriores hasta la época de Augusto, como el mito de Polifemo y Galatea, Circe, etc.
Los dioses en Ovidio son sensuales y frívolos, en la línea de la tradición alejandrina; las situaciones en que se ven envueltos contrastan con su supuesta majestad. El amor es el gran protagonista, el móvil de todos los seres. El estilo de Ovidio en las Metamorfosis es bastante retórico e innovador en la creación de términos.




martes, 1 de octubre de 2013

La odisea

Como os recomendaba en la entrada anterior, para acceder a los principales episodios de La Odisea y ver algunas de las manifestaciones artísticas en ella inspirada, podéis consultar la página de la profesora Mª del Henar Velasco López sobre Cultura clásica:
http://web.usal.es/~hvl/Mitos/odisea.htm


J. Flaxman, Demódoco canta en la corte de los feacios.