Tres cuentos del Panchatantra.
Os he seleccionado tres cuentos para acercarnos a esa obra. Leedlos y ya los comentaremos en clase.
El primero de ellos, Los brahamanes y el león, es uno de los más conocidos y figura en la antología realizada por Jorge L. Borges y Adolfo Bioy Casares " CUENTOS BREVES Y EXTRAORDINARIOS"
Los brahamanes y el león, ilustración de Roxana Escolar |
Los
brahamanes y el león
En
cierto pueblo había cuatro brahmanes que eran amigos. Tres habían alcanzado el
confín de cuanto los hombres pueden saber, pero les faltaba cordura. El otro
desdeñaba el saber; sólo tenía cordura.
Un
día se reunieron. ¿De qué sirven las prendas, dijeron, si no viajamos, si no
logramos el favor de los reyes, si no ganamos dinero? Ante todo, viajaremos.
Pero
cuando habían recorrido un trecho, dijo el mayor:
-
Uno de nosotros, el cuarto, es un simple, que no tiene más que cordura. Sin el
saber, con mera cordura, nadie obtiene el favor de los reyes. Por consiguiente,
no compartiremos con él nuestras ganancias. Que se vuelva a su casa.
El
segundo dijo:
-
Mi inteligente amigo, careces de sabiduría. Vuelve a tu casa.
El
tercero dijo:
-
Ésta no es manera de proceder. Desde chicos hemos jugado juntos. Ven, mi noble
amigo. Tú tendrás tu parte en nuestras ganancias.
Siguieron
su camino y en un bosque hallaron los huesos de un león. Uno de ellos dijo:
-
Buena ocasión para ejercitar nuestros conocimientos. Aquí hay un animal muerto;
resucitémoslo.
El
primero dijo:
-
Sé componer el esqueleto.
El
segundo dijo:
-
Puedo suministrar la piel, la carne y la sangre.
El
tercero dijo:
-
Puedo darle vida.
El
primero compuso el esqueleto, el segundo suministró la piel, la carne y la
sangre. El tercero se disponía a infundir la vida, cuando el hombre cuerdo
observó:
-
Es un león. Si lo resucitan, nos va a matar a todos.
-
Eres muy simple -dijo el otro-. No seré yo el que frustre la labor de la
sabiduría.
-
En tal caso -respondió el hombre cuerdo- aguarda que me suba a este árbol.
Cuando
lo hubo hecho, resucitaron al león; éste se levantó y mató a los tres. El
hombre cuerdo esperó que se alejara el león, para bajar del árbol y volver a su
casa.
El
chacal y el cocodrilo
Érase
una vez un pequeño y astuto chacal que muy hambriento rondaba por la orilla del
gran río en busca de algún pececillo o cangrejito con que alimentarse.
Pero
en el fondo del río vivía un enorme cocodrilo, que también estaba hambriento y
que, escondido entre el barro y las cañas, espiaba al chacal en espera de que
en cualquier momento diese un paso en falso y cayera al agua para comérselo.
En
varias ocasiones a punto estuvo el chacal de meterse precisamente en la boca
del cocodrilo, pero valiéndose de su astucia logró salvarse del mortal peligro.
Entonces,
temeroso de ser engullido por el feroz cocodrilo, el chacal decidió irse a
pescar a otro lugar del río, donde no estuviera bajo la constante amenaza del
saurio. Pero éste, muerto de hambre y loco de rabia al ver que se le escapaba
tan rico bocado, determinó salir del río e ir en busca de la guarida del chacal
para vengarse de él. Y ésa fue su perdición, porque enterado el astuto chacal
de que el cocodrilo aguardaba en el interior de su madriguera para comérselo,
encendió una enorme hoguera a la entrada hasta que el enemigo, impotente para
franquear la barrera de llamas, quedó reducido a un montón de cenizas.
El
elemento propio da fuerza y confianza; salirse de él es un riesgo imprudente.
Libro
III, cuento IV
En cierta región de un bosque vivía un león llamado Kharanakhara que corriendo un día hambriento por todas partes no pudo cazar ninguna bestia. A eso de la puesta del sol, llegó a una gran cueva, entró en ella y pensó: «Seguramente que algún animal vendrá a pasar la noche en esta cueva; de modo que me voy a quedar aquí escondido». Estando allí en tal situación, llegó el dueño de la cueva, que era un chacal llamado Adhipuchchha, el cual miró y vio las huellas del pie de un león que había entrado y no salido de la cueva. Entonces pensó: «¡Ah!, perdido estoy; seguramente que aquí dentro hay un león. ¿Qué hago? ¿Cómo he de huir?». Pensando así y sin moverse de la puerta empezó a gritar:
En cierta región de un bosque vivía un león llamado Kharanakhara que corriendo un día hambriento por todas partes no pudo cazar ninguna bestia. A eso de la puesta del sol, llegó a una gran cueva, entró en ella y pensó: «Seguramente que algún animal vendrá a pasar la noche en esta cueva; de modo que me voy a quedar aquí escondido». Estando allí en tal situación, llegó el dueño de la cueva, que era un chacal llamado Adhipuchchha, el cual miró y vio las huellas del pie de un león que había entrado y no salido de la cueva. Entonces pensó: «¡Ah!, perdido estoy; seguramente que aquí dentro hay un león. ¿Qué hago? ¿Cómo he de huir?». Pensando así y sin moverse de la puerta empezó a gritar:
-¡Eh,
caverna, ce! -Dicho esto, añadió de nuevo-: Ce, ¿ignoras que tienes un pacto
conmigo, según el cual yo te he de hablar al venir de fuera y tú me has de
responder? Si no me respondes, pues, me voy a otra gruta.
El
león al oír esto pensó: «Sin duda que caverna invita a éste siempre que viene y
hoy se calla por temor a mí. Pues se ha dicho esto:
»
Voy, pues, a llamarle yo para que entre y me sirva de comida». Habiéndolo
pensado así, le llamó. El rugido del león llenó todo el ámbito de la caverna,
retumbando en ella cien veces; de tal modo, que puso en fuga hasta las bestias
que estaban lejos. El chacal huyó enseguida a todo correr y recitó esta zloka:
Quien
procede con cautela vive feliz, y no vive el que obra sin discernimiento. Yo me
he hecho viejo viviendo en el bosque, y nunca he oído que una cueva hable.
Después de leer los tres cuentos , el que más me ha gustado ha sido "Los brahamanes y el león" ya que es una demostración clara de que no siempre el tener mucha sabiduría ayuda a vivir mejor.
ResponderEliminarEl hombre cuerdo le bastó con pensar las consecuencias de lo que los brahamanes querían hacer y así pudo evitar que el león le devorase , sin embargo los brahamanes se pensaban que su plan iba a ser fructuoso porque disponían de más inteligencia y lo llevaron a cabo sin hacer caso a lo que el hombre cuerdo dijo , así pues , ellos sí que fueron devorados.
De los tres cuentos expuestos,el que mejor me ha transmitido su moraleja y enseñado ha sido el primero,"Los brahamanes y el león",me transmite que no todo en esta vida es la inteligencia,sino que a veces lo mejor es guiarse por el sentido común y pararse a pensar dos veces lo que vas a proceder a hacer.
ResponderEliminarEn este caso demuestra que los tres hombres son pedantes e incluso llegan a ser fanfarrones,al subestimar al cuarto amigo y tacharlo simple,al final del cuento los tres brahamanes "sabios" murieron devorados por el león que ellos mismos resucitaron sin hacer caso a la advertencia de su amigo cuerdo que les decía que los devoraría,el cuerdo por el contrario se salvó al subir a un árbol.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarDe los tres cuentos, el que más me ha gustado es el de "Los tres brahamanes y el león".
ResponderEliminarLo que más me ha llamado la atención del todo el cuento es el giro que da la historia. Al cuerdo no lo acepta uno de los tres brahamanes, aunque los otros dos sí. Al aceptarlo sigue el viaje con ellos y es el más precavido cuando van a revivir al león. El sentido común y lógico que tiene el cuerdo no lo tienen los otros brahamanes, por muy inteligentes que sean.
Creo que lo que hay que extraer de la historia es que más vale tener cordura, pensar mejor las cosas y razonarlas de varias maneras, antes de actuar.
Álvaro Catena.
Después de leer los tres fragmentos, el que mas me ha llamado la atención ha sido el de " Libro III, Cuento IV".
ResponderEliminarTanto el león como el chacal actúan con astucia. Por una parte el león dado que sabe que es un animal fuerte, se esconde en la cueva sabiendo que cualquier animal que entre podrá ser su comida. A su vez el chacal cuando llega a la cueva y ve las huellas sabe que algo hay en su cueva,y por ello le pregunta a la cueva, sabiendo que si algo responde es un animal,, ya que las cuevas no hablan.
La enseñanza que se puede extraer a este cuento se puede explicar con el siguiente:" El diablo sabe más por viejo que por diablo".
Después de leer los tres cuentos, el que mas me ha gustado ha sido "Los brahamanes y el león".
ResponderEliminarya que sus propios hermano, por el ser le más sensato quieren dejarlo pero finalmente consigue hacer el viaje y sobrevivir al león porque resulta ser el más inteligente por subir al árbol.
Nos enseña que la cordura y la inteligencia son unas cosa necesaria en la vida para poder evitar los problemas.
Los tres cuentos muestran grandes lecciones que creo que son importantes.
ResponderEliminarEn ''Los brahamanes y el león'' demuestra que con solo la sabiduría no se puede llegar muy lejos, porque aunque reviven a un león muerto, es necesario que una persona sea cuerda, y piense las cosas antes de hacerlas para no cometer grandes errores, y por eso solo el cuerdo se da cuenta de que les matará cuando vuelva a la vida.
En ''El chacal y el cocodrilo'' hace ver que a veces cuando crees que vas a ganar, ya que el cocodrilo creía que iba a comerse al chacal, te confías y pueden sorprenderte, como hace este con el fuego en su casa, y acabas perdiendo todo.
En ''Libro III, cuento IV'' aquí refleja que puedes creer que eres más fuerte, pero tu contrincante siempre puede ser más inteligente, por lo que el león no se da cuenta de que diciendo que estaba allí, el chacal huirá y no podrá comerselo.
Marta Gómez Puchades 2ºbatA